Los animales, las plantas o la tierra no nos piden nada, nos aceptan tal como somos, seres vivos entre otras innumerables formas de vida. Desafortunadamente esto no siempre sucede en la sociedad, donde se tiende a clasificar a las personas y no se aceptan a las que no cumplen determinados estándares.

Vivimos en un entorno donde el qué dirán, y qué pensarán de mí, afecta de tal forma que no nos dejan ser realmente lo que somos. Esto nos impide darnos cuenta que permitirse ser como uno es, trae efectos psicológicos positivos muy eficaces. Por ejemplo, nos brinda estímulos que nos aleja de la rutina, del pensamiento único, de lo convencional y liberan la creatividad, de hecho se duplica, según algunos psicólogos.

Entrar en contacto con lo natural nos ayuda a redescubrirnos, ya que nuestras preocupaciones y problemas parecen más lejanas. El entorno natural modifica el modo en que funciona nuestra mente. Por ejemplo, cuando nos movemos por el campo, la atención dirigida descansa y es reemplazada por la fascinación.

Esto sin duda es un descanso, que a menudo necesitamos, pues la atención dirigida que nos exige el trabajo o estudio puede causar fatiga y conductas impulsivas. De ahí la importancia de hacer cosas diferentes y originales, para sentirse mejor consigo mismo.

Hemos creado un mundo en muchos sentidos superficiales, con vidas artificiales que se han ido desarrollando debido a las exigencias que nosotros mismos hemos inventado. Cuando la verdad es que todo podría ser mucho más sencillo de lo que es, si solo nos dejáramos influenciar más por lo natural, pues ésta es nuestra parte original.

Nuestro tiempo es valioso y lo malgastamos viviendo la vida de otros. No dejemos engañarnos por los dogmas, es decir, vivir como otros piensan que deberíamos vivir. No dejemos que el ruido de las opiniones de los demás se impongan sobre nuestra propia voz interior. Y, lo que es más importante, tener el coraje para hacer lo que dice nuestra intuición.

Conectémonos con nuestro lado natural, ya que éste nos va a llevar a la felicidad más sincera. #SerNaturalEs ser tu mismo, no un pecado.